viernes, 15 de febrero de 2013

La NASA transmitirá el sobrevuelo de un asteroide que pasará cerca de la Tierra

14 de febrero de 2013:  NASA Televisión comenzará a transmitir a las 2 p.m., hora oficial del Este (EST, por su acrónimo en idioma inglés) o a las 11 a.m., hora oficial del Pacífico (PST, por su sigla en idioma inglés), del viernes 15 de febrero, el cercano, pero seguro, sobrevuelo de un pequeño asteroide que pasará cerca de la Tierra, llamado "2012 DA14". Para la NASA, es muy importante rastrear asteroides y proteger a nuestro planeta de ellos. Este sobrevuelo brindará una oportunidad única a los investigadores de estudiar un objeto cercano a la Tierra, muy de cerca.
La transmisión, que durará media hora, y que se realizará desde el Laboratorio de Propulsión a Chorro (Jet Propulsion Laboratory o JPL, por su sigla en idioma inglés), de la NASA, situado en Pasadena, California, incorporará animación en tiempo real con el fin de mostrar la ubicación del asteroide en relación con la Tierra, junto con imágenes en vivo o casi en tiempo real del asteroide, captadas desde observatorios localizados en Australia, si las condiciones del tiempo lo permiten.


NASA Broadcasts 2012 DA14 (splash)
 
 Un video de la NASA presenta el sobrevuelo del asteroide 2012 DA14, que marcará un récord. Asimismo, en un blog relacionado, Bill Cooke, del Centro Marshall para Vuelos Espaciales (Marshall Space Flight Center, en idioma inglés), responde la pregunta: ["¿Puedo ver el sobrevuelo del asteroide que se acerca?"] 
 
En el momento de su máximo acercamiento a la Tierra, que tendrá lugar aproximadamente a las 2:25 p.m., hora oficial del Este (EST) o a las 11:25 a.m., hora oficial del Pacífico (PST) o a las 19:25, hora universal (UTC, por su sigla en idioma inglés), el asteroide estará a alrededor de 27.600 kilómetros (17.150 millas) por encima de la superficie de la Tierra. El asteroide 2012 DA14 mide aproximadamente 50 metros de ancho, es decir casi la mitad del tamaño de una cancha de fútbol. Debido a que las observaciones periódicas del cielo comenzaron en la década de 1990, los astrónomos nunca habían visto un objeto tan grande acercarse tanto a nuestro planeta. El asteroide en verdad pasará más cerca de la Tierra que muchos satélites artificiales.
Los comentarios estarán disponibles a través de NASA TV y serán transmitidos en vivo por Internet en: http://www.nasa.gov/ntv y en: http://www.ustream.tv/nasajpl2.

Además de los comentarios, aproximadamente al mediodía, hora oficial del Este (9 a.m., hora oficial del Pacífico), y hasta la tarde, en http://www.ustream.tv/nasajpl2, se transmitirán imágenes del sobrevuelo del asteroide, en tiempo real, antes y después de su máximo acercamiento. Dichas imágenes serán proporcionadas por astrónomos ubicados en Australia y en Europa, si las condiciones del tiempo lo permiten.

Asimismo, se transmitirá información del sobrevuelo, a través de Ustream, que proporcionará un telescopio del Centro Marshall para Vuelos Espaciales, de la NASA, ubicado en Huntsville, Alabama. Esta transmisión durará tres horas y se iniciará a las 9 p.m., hora oficial del Este (EST) o a las 8 p.m., hora oficial central (CST, por su sigla en idioma inglés). Para ver la transmisión y hacer preguntas a los investigadores sobre el sobrevuelo, a través de Twitter, ingrese a: http://www.ustream.tv/channel/nasa-msfc.

Posible actividad sísmica en el asteroide 2012 DA14

14 de febrero de 2013:  Durante eones, la Tierra ha sentido los temblores de asteroides que golpeaban a nuestro planeta. Desde la extinción de los dinosaurios, hace 65 millones de años, hasta los derribados bosques ubicados en Tunguska, en el año 1908, las rocas espaciales continuaron llegando.
Esta semana, la Tierra contraataca. Cuando el asteroide 2014 DA14 realice su acercamiento récord a nuestro planeta, el 15 de febrero, la roca espacial podría ser la que sienta uno de esos temblores.
Una nueva investigación llevada a cabo por Richard Binzel, un profesor de ciencias planetarias del Instituto de Tecnología de Massachusetts (Massachusetts Institute of Technology o MIT, por su acrónimo en idioma inglés), sugiere que muchos asteroides cercanos a la Tierra experimentan una sacudida sísmica cuando pasan demasiado cerca del campo gravitacional de nuestro planeta.
"Vamos a estar observando de cerca para ver si hallamos evidencia de actividad sísmica en 2014 DA14 cuando nos sobrevuele", dice Binzel. "Este es el primer caso de un objeto que se acerca lo suficiente como para experimentar movimientos 'Y' del cual tenemos suficiente notificación como para planificar observaciones".


Asteroid Quakes (splash)
 
 
 Un video ScienceCast presenta una vista previa del sobrevuelo cercano que realizará el asteroide 2012 DA14. Reproducir el video
 
Binzel comenzó a considerar la idea de los "terremotos" en los asteroides hace algunos años cuando estaba reflexionando sobre un misterio vinculado con los asteroides cercanos a la Tierra:
"A medida que los asteroides se mueven a través del espacio, lentamente se convierten en objetos de color rojo oscuro. Este fenómeno, denominado "meteorización espacial", es ocasionado por la prolongada exposición a los rayos cósmicos y a la radiación solar. Durante décadas, sin embargo, hemos sabido de un grupo de pequeños asteroides que se veían inalterados; no habían sido meteorizados (erosionados) por el espacio".
¿Cómo evitó la meteorización del espacio este grupo de rocas espaciales? Para develar el misterio, Binzel y algunos colegas calcularon las órbitas de los asteroides y descubrieron una reveladora pista: todos ellos pasaron muy cerca de la Tierra en el último millón de años.
"Creemos que fueron 'sacudidos' por sus encuentros con la Tierra", dice. "Las fuerzas gravitacionales que actúan durante los sobrevuelos pueden estirar, agitar y torcer a estos asteroides, causando de este modo que el material oscuro de la superficie, meteorizado (erosionado) por el espacio, sea eliminado, lo cual deja al descubierto el material nuevo que yace debajo".
No existe una Escala de Richter para los asteroides. En cambio, Binzel expresa la fuerza de los movimientos en unidades de aceleración gravitacional, o unidades "g". Por lo tanto, 1 g = la aceleración ocasionada por la gravedad sobre la superficie de la Tierra. "Estos asteroides experimentan la actividad sísmica en el rango de mili a micro g", señala. Eso podría no parecer mucho, pero recuerden que se trata de cuerpos pequeños. La gravedad no es muy fuerte, de modo que apenas una pequeña sacudida o un diminuto estiramiento se hace sentir".
Binzel imagina lo que podría ver un astronauta que flota al lado de un asteroide: "La superficie podría lentamente balancearse o moverse algunos centímetros. Otras cosas que se podrían buscar serían ráfagas de polvo de asteroides que se levanten desde la superficie y que ocasionen una suave avalancha sobre las pendientes más empinadas de los cráteres". En raros casos, los asteroides que tienen "pilas de escombros" podrían romperse durante el encuentro y luego volver a tomar su forma, a medida que la Tierra se aleja.


Toutatis (Goldstone, 200px)
 
El radar Goldstone, de la NASA, mide 70 metros de diámetro. [Más información
 
El 15 de febrero, 2012 DA14 se trasladará entre la Tierra y el cinturón de los satélites geosíncronos que orbita nuestro planeta. En su máximo acercamiento, la roca de 50 metros de diámetro estará a apenas 27.680 kilómetros (17.200 millas) por encima de la superficie de la Tierra, lo que significa que es un objetivo excelente para los radares y los telescopios.
Nick Moskovitz, quien tiene un estudio de posgrado en el MIT y trabaja con Binzel, está coordinando observaciones con observatorios de todo el mundo con el propósito de determinar el color, el giro, la forma y la reflectividad del asteroide a medida que pase. Los cambios en cualquiera de los parámetros mencionados podrían ser un signo de un "temblor". Entre los telescopios que participan de dicha observación se encuentran los siguientes: La Palma, en las Islas Canarias, los observatorios Siding Spring y Perth, en Australia, Mount John, en Nueva Zelanda, Mount Canopus, en Tasmania, WISE (Wide-Field Infrared Survey Explorer, en idioma inglés, o Explorador Infrarrojo de Campo Amplio para Sondeo, en idioma español), en Israel y el Centro Clay, en Massachusetts.
Asimismo, el radar Goldstone, de la NASA, enviará señales a 2012 DA14. Los datos del radar se pueden utilizar para crear películas en 3D que muestren a la roca espacial desde todos los lados. Goldstone podría ser el primero en captar el temblor de un asteroide en acción.
"Estimo que aprenderemos mucho de las observaciones", dice Binzel.
¡Que comience el sobrevuelo!

sábado, 9 de febrero de 2013

Nueva evidencia de hielo en Mercurio

9 de diciembre de 2012: Nuevos datos proporcionados por la nave espacial MESSENGER (acrónimo de MErcury Surface, Space ENvironment, GEochemistry and Ranging, en idioma inglés o Superficie, Ambiente espacial, Geoquímica y Cálculo de la Distancia de Mercurio, en idioma español), de la NASA, sugieren que hay suficiente hielo en Mercurio como para recubrir todo el Capitolio de Estados Unidos.
"Los nuevos datos indican que el hielo en las regiones polares de Mercurio, si se extendiera sobre un área del tamaño de Washington, D.C., tendría más de 3,2 kilómetros (2 millas) de espesor", dijo David Lawrence, quien es un científico que participó en el proyecto MESSENGER, en el Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad Johns Hopkins (Johns Hopkins University Applied Physics Laboratory o APL, por su sigla en idioma inglés), ubicado en Laurel, Maryland. Lawrence es autor principal de uno de los tres artículos que describen los hallazgos en la edición en línea de Science Express.

Ice on Mercury (splash)
 
 Polo norte de Mercurio. El color rojo indica las áreas que están en sombra en todas las imágenes tomadas por MESSENGER hasta la fecha. (El mapeo de las sombras está todavía incompleto cerca del polo). El color amarillo muestra la ubicación de los depósitos polares brillantes fotografiados por un radar con base en tierra. Actualización de NL Chabot y colaboradores, de la revista científica Journal of Geophysical Research, 117, doi: 10.1029/2012JE004172 (2012). Más información
 
Dada su proximidad al Sol, Mercurio parecería ser un lugar poco probable para encontrar hielo. Pero la inclinación del eje de rotación de Mercurio es casi cero (menos que un grado), por lo que hay huecos en los polos del planeta que nunca reciben la luz del Sol. Los científicos sugirieron hace décadas que el hielo podría quedar atrapado en esas zonas en sombra de los polos de Mercurio.
La idea recibió impulso en 1991, cuando el radiotelescopio de Arecibo, en Puerto Rico, detectó parches inusualmente brillantes en el radar, los cuales estaban ubicados en los polos de Mercurio. Estos parches son manchas que reflejan las ondas de radio tal como se esperaría si hubiera hielo. Muchos de estos parches corresponden a la ubicación de grandes cráteres de impacto que fueron mapeados por la nave espacial Mariner 10 en la década de 1970. Pero los investigadores no estaban seguros de si los parches brillantes en el radar, detectados por Arecibo, correspondían a lugares en sombras en los cráteres.
La llegada de la nave espacial MESSENGER a Mercurio, el año último, cambió eso. Las imágenes tomadas por el Sistema Dual de Obtención de Imágenes de Mercurio, en 2011 y a principios de este año, muestran que los rasgos brillantes en el radar, los cuales corresponden a los polos norte y sur de Mercurio, se encuentran dentro de las regiones en sombras sobre la superficie de Mercurio.
Ahora, los datos más recientes proporcionados por MESSENGER confirman que el hielo es el componente principal de los depósitos polares en el norte de Mercurio. En los lugares más fríos, el hielo está expuesto en la superficie. En lugares levemente más cálidos, algún tipo de material aislante oscuro parece cubrir el hielo.
MESSENGER utiliza espectroscopia de neutrones para medir las concentraciones promedio de hidrógeno dentro de las regiones brillantes de Mercurio que aparecen en el radar. Las concentraciones de hielo derivan, a su vez, de las mediciones de hidrógeno. Esto es posible porque el agua, o H2O, tiene dos partes de hidrógeno.
"Los datos sobre los neutrones indican que los depósitos polares de Mercurio, brillantes en el radar, contienen en promedio una capa rica en hidrógeno cuyo espesor supera las decenas de centímetros por debajo de una capa superficial, que posee de 10 a 20 centímetros de espesor, que es menos rica en hidrógeno", dice Lawrence. "La capa sepultada tiene un contenido de hidrógeno que se corresponde con hielo de agua casi pura".
Datos proporcionados por el Altímetro Láser de Mercurio (Mercury Laser Altimeter o MLA, por su sigla en idioma inglés), de MESSENGER, el cual ha disparado más de 10 millones de pulsos láser hacia Mercurio para confeccionar mapas detallados de la topografía del planeta, corroboran la hipótesis sobre el hielo, escribe Gregory Neumann, del Centro Goddard para Vuelos Espaciales (Goddard Space Flight Center, en idioma inglés), de la NASA. En un segundo artículo, Neumann y sus colegas informan que las primeras mediciones hechas con láser de las regiones en sombra del polo norte revelan depósitos irregulares, oscuros y brillantes, cerca del polo norte de Mercurio.
"Nadie había visto antes estas regiones oscuras en Mercurio, así que fueron misteriosas al principio", dice Neumann.
Asimismo, Neumann sugiere que ambos materiales, tanto el oscuro como el brillante, fueron llevados a Mercurio por cometas o asteroides; un hallazgo corroborado en un tercer artículo dirigido por David Paige, de la Universidad de California en Los Ángeles.
"El material oscuro es probablemente una mezcla de compuestos orgánicos complejos liberados en Mercurio por los impactos de cometas y asteroides altamente volátiles, los mismos objetos que probablemente liberaron agua en el planeta más interior", dice Paige.
Este material oscuro aislante da un nuevo giro a la historia, agrega Sean Solomon, del Observatorio Terrestre Lamont-Doherty, de la Universidad de Columbia. Solomon es el investigador principal de la misión MESSENGER. "Durante más de 20 años, el jurado ha estado deliberando sobre si el planeta más cercano al Sol alberga hielo abundante en las regiones polares que se encuentran permanentemente en sombras. MESSENGER ha proporcionado ahora un veredicto afirmativo unánime".
"Pero las nuevas observaciones también han planteado nuevas preguntas", añade Solomon. "¿Los materiales oscuros en los depósitos polares están formados principalmente por compuestos orgánicos? ¿Qué tipo de reacciones químicas ha experimentado ese material? ¿Existen regiones en o dentro de Mercurio que podrían tener tanto agua líquida como compuestos orgánicos? Sólo con la continua exploración de Mercurio podemos tener la esperanza de avanzar en estas nuevas preguntas".

domingo, 3 de febrero de 2013

Voyager 1 "saborea" el espacio interestelar

4 de diciembre de 2012: A 18 mil millones de kilómetros (11 mil millones de millas) de distancia de la Tierra, la sonda espacial Voyager 1, de la NASA, ha entrado en una "carretera magnética" que conecta nuestro sistema solar con el espacio interestelar. Este podría ser uno de los últimos pasos de Voyager en su largo recorrido hacia las estrellas.
"A pesar de que la sonda Voyager 1 se encuentra aún en el entorno solar, ahora podemos saborear cómo es el exterior de dicho entorno debido a que las partículas entran y salen de esta carretera magnética", comenta Edward Stone, quien es un científico del proyecto Voyager, en el Instituto de Tecnología de California (California Institute of Technology o Caltech, en idioma inglés), el cual está ubicado en Pasadena. "Creemos que esta es la última etapa en nuestro camino hacia el espacio interestelar. Nuestra mejor estimación es que se encuentra desde solo unos meses hasta un par de años de distancia. La nueva región no es lo que esperábamos, pero hemos llegado a esperar lo inesperado de Voyager".


Un video de la NASA muestra a la sonda Voyager 1 viajando a través de la carretera magnética. Haga clic aquí para ver el video
 
Los nuevos resultados fueron descriptos el 3 de diciembre en la reunión de la Unión de Geofísica Estadounidense (American Geophysical Union, en idioma inglés), que tuvo lugar en San Francisco.
La "carretera magnética" es un lugar ubicado en los lejanos confines del sistema solar, donde el campo magnético del Sol se conecta con el campo magnético del espacio interestelar. Esta conexión permite que las partículas cargadas del interior de la heliosfera (la burbuja magnética que rodea al Sol) se alejen y también permite que las partículas cargadas de afuera fluyan hacia adentro. Cuando la sonda Voyager 1 está en la carretera magnética, sensores de partículas colocados a bordo pueden tomar muestras de material directamente desde más allá de nuestro sistema solar.
Desde diciembre de 2004, cuando Voyager cruzó un punto en el espacio llamado frente de choque de terminación, la sonda ha estado explorando la capa externa de la heliosfera o "heliofunda". En los últimos años, la velocidad del viento solar alrededor de la sonda Voyager ha disminuido a cero y la intensidad del campo magnético se ha incrementado.

De acuerdo con los datos de dos instrumentos colocados a bordo que miden partículas cargadas, Voyager 1 ingresó por primera vez en la carretera magnética el 28 de julio de 2012. La región se acercó y se alejó de Voyager varias veces. La nave espacial ingresó de nuevo en la región el 25 de agosto y el ambiente ha permanecido estable desde entonces.
Datos proporcionados por la sonda revelaron que el campo magnético se tornaba más fuerte cada vez que Voyager ingresaba en la región de la carretera; sin embargo, la dirección de las líneas del campo magnético no cambió como los investigadores hubieran esperado si Voyager 1 hubiera ingresado verdaderamente en el espacio interestelar.
"Estamos en una región magnética como ninguna otra en la que hayamos estado antes (aproximadamente 10 veces más intensa que antes del frente de choque de terminación), pero los datos del campo magnético no muestran indicios de que estemos en el espacio interestelar", comenta Leonard Burlaga, quien es miembro del equipo del magnetómetro de Voyager, en el Centro Goddard para Vuelos Espaciales (Goddard Space Flight Center, en idioma inglés), de la NASA, ubicado en Greenbelt, Maryland.
Aparentemente, la salida de la sonda Voyager 1 del sistema solar está por venir. Pero la carretera magnética está dando una muestra de lo que le espera más adelante.
Manténgase conectado con Ciencia@NASA para recibir actualizaciones desde los confines del sistema solar.
.